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Ante reconfiguración del T-MEC dan ‘respiro’ de 7 años al sector automotriz
El sector automotriz mexicano tendrá un “respiro” de al menos siete años para adecuarse a las nuevas reglas de origen que se endurecieron con la reconfiguración del T-MEC.
El equipo negociador de México en este acuerdo con Estados Unidos y Canadá admitió haber cedido en cuanto al origen del acero de los componentes de la industria automotriz pero no en la presencia de inspectores extranjeros en el país.
En rueda de prensa, el subsecretario mexicano de Relaciones Exteriores para América del Norte, Jesús Seade, encargado de la negociación, explicó que el tratado contempla que durante los próximos siete años 70 % de los componentes de acero del sector automotor deberá provenir de América del Norte, algo que dificulta las cosas a México porque importa mucho de Suramérica.
“En los espacios de negociación cada quien jala (estira). En el tema del acero ellos querían diez años y nosotros tres años; fueron siete”, explicó el subsecretario, quien admitió haber cedido como ocurre en cualquier negociación.
Junto al canciller mexicano, Marcelo Ebrard, el subsecretario detalló la versión definitiva del T-MEC, firmada este martes en México tras un año de negociaciones para lograr el apoyo del Partido Demócrata estadounidense al tratado, cuya negociación se había cerrado en noviembre de 2018.
Seade confirmó que los demócratas, que mantenían bloqueado el proceso de ratificación en la Cámara de Representantes bajo el liderazgo de Nancy Pelosi, habían propuesto enviar inspectores a analizar si las empresas mexicanas cumplían con el tratado.
El negociador mexicano reveló que “el concepto de inspectores”, que se entendía como una violación de la soberanía mexicana, quedó “totalmente y completamente fuera”.
En su lugar, se crea un mecanismo de solución de controversias formado por jueces de los diferentes países del tratado que resuelvan denuncias por incumplir aspectos contemplados en el documento.
“Por supuesto que no son inspectores, no son unilaterales ni decisiones que se disparen en un balazo”, sostuvo el subsecretario para América del Norte.
APLAUDE IP, PERO…
Ante las nuevas reglas automotrices, la iniciativa privada local aplaudió la decisión, aunque fuentes del sector acerero tuvieron dudas.
Fuentes del sector acerero informaron que el único proveedor que tiene planchón prefabricado es Arcelor Mittal, por lo que los demás deberían hacer ajustes.
A nivel local, el vicepresidente nacional de la Región Norte-Centro de Canacintra, Eduardo Garza dijo que el acuerdo le dará una solidificación muy importante a la economía, en el caso de Coahuila si no se había parado se va a reactivar todavía más.
Mientras que el ex presidente de Canaco Saltillo, Alejandro Pepi de la Peña, consideró que es un gran logro de los tres países y una excelente noticia, toda vez que se está terminando un año bastante complicado por la falta de credibilidad.
Por su parte, el presidente de ARHCOS, Ramiro Peña González consideró que hay que estar muy observantes de todo lo que se tenga que regular más lo que ya está normado y tener las estrategias para sacar la mejor ventaja, la intención es buena y estar aliados es excelente, pero no se debe desatender que ante la polémica que se generó por algunas intenciones que tiene el TMEC en cuestiones laborales hay que mantenerse muy atentos y no perder la atención de todo lo que vaya sucediendo y cómo se vaya resolviendo en México.
El presidente de la Cámara de Comercio de Canadá Capítulo Coahuila, Martín Rosales expresó que el resultado es muy positivo y gratificante para el pueblo mexicano porque está uniendo a EU y Canadá, se llegó a buenos términos y alienta la inversión en un 2020.
El secretario de Economía, Jaime Guerra comentó que para Coahuila es muy importante la firma del tratado al ser un estado automotriz, pues de los 800 mil trabajadores dados de alta ante el IMSS, 250 mil corresponden a este sector y representan el 31.2%.
Finalmente el actual primer vicepresidente y próximo presidente de ARHCOS, Elías Martínez. consideró que la ratificación del T-MEC es muy bueno y es algo que estaba en suspenso su firma, por lo que es excelente su firma y ahora se espera que los congresos lo autoricen para que empiecen las cosas mucho mejor para México.